HACIA OCTUBRE DE 2024: ¿CÓMO SER UNA IGLESIA SINODAL EN MISIÓN?
Equipo sinodal de Tarazona |
MATERIAL PARA TRABAJAR EL CUESTIONARIO DE LA C.E.E. EN GRUPO (febrero-abril de 2024) FICHA N.º 3 PARA LA REUNIÓN SINODAL |
Presentación de la tercera reunión
Recordamos de nuevo que, tras las reuniones que ya hemos tenido, la pregunta orientadora de esta fase sinodal es la siguiente: “¿Cómo ser una Iglesia sinodal en misión?” partiendo de la lectura de algunos temas o capítulos del Informe de síntesis.
En esta tercera reunión se trata de leer dos capítulos: el capítulo 16 de dicho Informe, titulado “Por una iglesia que escucha y acompaña”, tema central de este sínodo, así como el capítulo 18, titulado “Organismos de participación” a nivel parroquial y diocesano.
1.- PREPARACIÓN PERSONAL DE LA REUNIÓN
El animador del grupo recordará que antes de cada reunión se debe hacer un trabajo personal, consistente en:
- Una lectura personal de los capítulos del Informe de Síntesis en clima de oración
- Confiándose al Padre, conversando en la oración con Jesucristo y escuchando al Espíritu Santo, cada uno prepara su propia aportación sobre la cuestión sobre la que se invita a discernir en el grupo.
- Contestar a las preguntas N.º 3 y N.º 4 del cuestionario, correspondientes a esta reunión.
2.- REUNIÓN DEL GRUPO. ORACION DEL SINODO Y LECTURA DE LA PALABRA
Una vez realizada el trabajo personal en casa y teniendo como referente las dos preguntas que nos ocuparán en esta reunión: ¿Qué modos de relación, estructuras, procesos de discernimiento y decisión respecto a la misión permiten reconocerla, configurarla, promoverla? Y la segunda, ¿Qué ministerios y órganos de participación pueden renovarse o introducirse para expresar mejor la corresponsabilidad?, comenzamos rezando.
ANIMADOR/A. Invocamos la ayuda que nos viene de Dios. Nos abrimos a las llamadas del Espíritu.
Estamos ante ti, Espíritu Santo, reunidos en tu nombre. Tú que eres nuestro verdadero consejero: ven a nosotros, apóyanos, entra en nuestros corazones. Enséñanos el camino, muéstranos cómo alcanzar la meta. Impide que perdamos el rumbo como personas débiles y pecadoras. No permitas que la ignorancia nos lleve por falsos caminos. Concédenos el don del discernimiento, para que no dejemos que nuestras acciones se guíen por prejuicios y falsas consideraciones. Condúcenos a la unidad en ti, para que no nos desviemos del camino de la verdad y la justicia, sino que en nuestro peregrinaje terrenal nos esforcemos por alcanzar la vida eterna. Esto te lo pedimos a ti, que obras en todo tiempo y lugar, en comunión con el Padre y el Hijo por los siglos de los siglos. Amén.
TEXTOS DE LA PALABRA DE DIOS
LECTOR/A:
Lc 5, 36-38. Les dijo también una parábola: Nadie recorta una pieza de un manto nuevo para ponérsela a un manto viejo; porque, si lo hace, el nuevo se rompe y al viejo no le cuadra la pieza del nuevo. Nadie echa vino nuevo en odres viejos: porque, si lo hace, el vino nuevo reventará los odres y se derramará, y los odres se estropearán. A vino nuevo, odres nuevos. Nadie que cate vino añejo quiere del nuevo, pues dirá: El añejo es mejor.
Hechos, 4, 32-35. La multitud de los creyentes no tenía sino un solo corazón y una sola alma. Nadie llamaba suyos a sus bienes, sino que todo era en común entre ellos. Los apóstoles daban testimonio con gran poder de la resurrección del Señor Jesús. Y gozaban todos de gran simpatía. No había entre ellos ningún necesitado, porque todos los que poseían campos o casas los vendían, traían el importe de la venta, y lo ponían a los pies de los apóstoles, y se repartía a cada uno según su necesidad.
3.- CONTESTAMOS A LAS PREGUNTAS N.º 3 Y 4 DEL CUESTIONARIO
Recordemos que contestaremos a estas dos preguntas del cuestionario de la CEE con la metodología propia de la conversación en el Espíritu, es decir, utilizando la escucha, el silencio orante y las aportaciones de cada uno, escuchando al Espíritu, para hacer un discernimiento en grupo, sinodal, para lo cual es importante seguir las pautas que marcará el animador/a del grupo. Estas son las dos preguntas:
PREGUNTA N.º 3. Con la tercera pregunta del cuestionario, para hacer un discernimiento comunitario, nos recuerdan nuestros obispos que la Sinodalidad ha de concretarse en estructuras que faciliten la escucha activa, el diálogo sincero y el discernimiento comunitario en el Espíritu Santo. Nos preguntamos cómo hacer posible la participación de todos en los procesos de discernimiento y decisión de los asuntos que conciernen a la vida y a la misión de la Iglesia.
A la luz del capítulo 16 del Informe que hemos debido leer antes de la reunión, nos preguntamos: ¿Qué modos de relación, estructuras, procesos de discernimiento y decisión respecto a la misión permiten reconocerla, configurarla, promoverla?
– Respuesta N.º 3: Hacer propuestas muy concretas, que ayuden a dar pasos en la praxis de la sinodalidad.
El animador/a del grupo, pone en marcha las rondas de intervenciones de cada miembro del grupo sinodal:
- Primera ronda de intervenciones. Cada uno toma la palabra a partir de la reflexión personal que ha hecho en casa en clima de oración y escucha atentamente la contribución de los demás. Escuchamos en silencio orante la respuesta de cada uno a cada pregunta, sin entrar en debate y al finalizar la ronda, se guarda un minuto de silencio orante para escuchar mejor.
- Segunda ronda de intervenciones. Hacer espacio a los demás y al Espíritu. Cada uno comparte de lo que ha escuchado a los demás, lo que más le ha resonado o lo que más resistencia ha suscitado en él, dejándose guiar por el Espíritu Santo. Tras la escucha, guardamos otro minuto de silencio orante.
- Tercera ronda de intervenciones. Construir juntos. Dialogamos juntos en el grupo a partir de lo que hemos aportado para discernir y recoger el fruto sinodal: reconocer intuiciones y convergencias, identificar discordancias u obstáculos, dejar que surjan voces proféticas. Es importante que todos los miembros del grupo puedan sentirse representados por el resultado del trabajo. El secretario/a escribe las respuestas.
PREGUNTA N.º 4 La Asamblea del Sínodo ha pedido que se potencien los diferentes órganos de participación que ya existen en el seno de la Iglesia a nivel parroquial, diocesano, etc. La sinodalidad crece cuando cada bautizado se implica en los procesos de discernimiento y decisión para la misión.
Tomando como guía el capítulo 18 del Informe de síntesis, nos preguntamos: ¿Qué ministerios y órganos de participación pueden renovarse o introducirse para expresar mejor la corresponsabilidad?
– Respuesta N.º 4.1. Sobre la renovación de los ya existentes
– Respuesta N.º 4.2 Sobre los que habría que introducir o crear
El animador/a del grupo, pone en marcha las rondas de intervenciones de cada miembro del grupo sinodal:
- Primera ronda de intervenciones. Cada uno toma la palabra a partir de la reflexión personal que ha hecho en casa en clima de oración y escucha atentamente la contribución de los demás. Escuchamos en silencio orante la respuesta de cada uno a cada pregunta, sin entrar en debate y al finalizar la ronda, se guarda un minuto de silencio orante para escuchar mejor.
- Segunda ronda de intervenciones. Hacer espacio a los demás y al Espíritu. Cada uno comparte de lo que ha escuchado a los demás, lo que más le ha resonado o lo que más resistencia ha suscitado en él, dejándose guiar por el Espíritu Santo. Tras la escucha, guardamos otro minuto de silencio orante.
- Tercera ronda de intervenciones. Construir juntos. Dialogamos juntos en el grupo a partir de lo que hemos aportado para discernir y recoger el fruto sinodal: reconocer intuiciones y convergencias, identificar discordancias u obstáculos, dejar que surjan voces proféticas. Es importante que todos los miembros del grupo puedan sentirse representados por el resultado del trabajo. El secretario/a escribe las respuestas.
ORACIÓN FINAL
Damos gracias a Dios por estas reuniones en las que hemos orado, discernido y aportado como grupo, sintiéndonos miembros de la iglesia diocesana y de la iglesia universal:
A ti, Dios nuestro, que asumes nuestra humanidad y le das VIDA por tu Espíritu, acudimos suplicantes, necesitados de tu fuerza y de tu gracia.
Bendice a la Iglesia Diocesana de Tarazona para que busque siempre tu voluntad y construya una Iglesia en salida, samaritana y servidora de todos.
Danos por tu Espíritu el aliento de VIDA que necesitamos para hacer de nuestras comunidades, escuelas de comunión. Inspíranos el ardor evangelizador de tus profetas, apóstoles y santos, haznos testigos creíbles, en permanente estado de misión.
Danos vigor, audacia, para llegar a todos para acoger, cuidar y acompañar a todos a los que te celebran cada día, a los que se alejaron de tu casa a los que todavía no saben cómo eres.
Señor Jesucristo acompaña con tu presencia alentadora, los esfuerzos de esta Iglesia Diocesana que emprende un tiempo de escucha, conversión y misión. Con María nuestra Madre te presentamos nuestra Diócesis, bendícela e infúndele tu VIDA. AMEN